Febrero es un mes especial en Jijona. Supone el principio, del inicio del ciclo de la vida para el sector del turrón. ¿Te preguntas por qué? Muy sencillo: febrero es el mes en el que los almendros enseñan su flor, y la naturaleza nos avisa de la maravilla que nos ofrece.
Jijona es una de las poblaciones mediterráneas con más superficie de almendros en flor plantada, por algo es la cuna del turrón, un producto compuesto principalmente por almendra.
En Jijona siempre que hablamos de turrón, bajamos la mirada hacia la tierra, porque en ella empieza todo. No en vano, los primeros turroneros fueron agricultores que buscaron una salida al excedente de almendra que les sobraba.
El turrón se respira, se siente y se ve en Jijona. Primero en este época, cuando los almendros muestran sus bellas flores de color blanco y magenta para anunciar que la primavera está a la vuelta de la esquina.
Después en septiembre, cuando las almendras se recolectan y la maquinaria turronera se pone en marcha para que a principios de noviembre, coincidiendo con el Día Mundial del Turrón, todos los lineales del mundo estén llenos de turrón con IGP Jijona.
Luego el 7 de noviembre, cuando celebramos por todo lo alto que el turrón es un producto universal que se disfruta especialmente en Navidad, desde hace muchos siglos.
Por último durante el mes de diciembre. Empezando con la Feria de Navidad, y siguiendo por las fechas destacadas en las que no faltan turrones y dulces elaborados en Jijona en ninguna mesa.
Pero para eso aún falta mucho. Estamos en febrero y os queremos invitar a disfrutar de un espectáculo natural de gran belleza.
Senda de los almendros en flor
Si visitar Jijona siempre es un acierto, porque su entorno natural recarga las pilas, ahora lo es aún más.
Os invitamos a disfrutar de la senda de los almendros en flor, un sendero de pequeño recorrido que comienza en el Barranc de la Font y acaba en el Pou de la Neu.
Pasa por el Castillo de Jijona, recientemente rehabilitado, llega hasta la ermita de Sant Antoni y recorre las faldas de la Carrasqueta.
La senda de los almendros en flor se extiende a lo largo de unos 12 kilómetros y tiene dificultad media, por lo que es ideal para recorrer a pie en familia. Un plan perfecto para disfrutar del fin de semana en contacto con la naturaleza y recargar pilas después en cualquier restaurante de la zona.
Te recomendamos que pruebes el Giraboix, una receta típica de Jijona que come sobre todo en invierno y que se compone de verdura, patata, huevo, embutido y alioli.
Tampoco te puedes marchar de Jijona sin probar alguno de los platos elaborados con turrón. NO hablamos solo de postres, nos referimos a la muestra más evidente de que el turrón de Jijona combina a la perfección con cualquier ingrediente, dulce o salado.
¿Te animas?
